PacificUV - Weekends, vocoders volátiles

Llega la primavera, el sol y el buen tiempo en general. La mejor forma de disfrutarlo es acompañarlo de buena electrónica, en este caso, abogando por sintetizadores, vocoders e intensidad moderada, llegando a paisajes intangibles. Por eso es momento de hablar de Weekeends, el tercer álbum de PacificUV, en el que han dado un giro mucho más electrónico que sus dos anteriores trabajos, en los que apostaban por mayor convergencia entre diferentes géneros. Han hecho un intento por reciclar parte de su sonido y han obtenido un buen resultado.

Los estadounidenses PacificUV apostaron en la pasada década por una sinergia entre la electrónica, algo de shoegaze y atmósferas propias de géneros volátiles como el dream pop o el rock espacial. En este tercer larga duración siguen apostando por esos sintetizadores que te dirigen a unas capas incorpóreas, preparadas para instalarse en tu mente. Pero lo hacen renunciando a la instrumentación básica y dándole todo el peso del disco a teclados, vocoders y demás artefactos no habituales. Este Weekends está más cercano a lo que pudiera ser un punto intermedio entre Solvent y Maps.


Siempre desde la base de una electrónica moderada e incluso bella, PacificUV vierten en el disco momentos de armonía en los que relajarse y ascender a otras realidades, como es el caso de Friday Night Dream o Baby Blue, donde la electrónica muestra una vez más que puede llegar a niveles a los que no se puede llegar con instrumentos convencionales. Las revoluciones bajas son una constante en Weekends, con una espesa capa de tranquilidad en I'm Here y más dosis aguijones cristalinos en Saturday Night Dreams y Feels Like I'm Going Home.



En el camino de la experimentación de estos tipos georgianos (del estado de Georgia, EEUU) se avistan interesantes horizontes sonoros como a los que se llega en Sunday Night Dream, que acaba la mini secuencia de los Night Dream del disco con un derrame distorsionador que se deja querer por el drone. Es en este tipo de canciones donde la mente puede abrir puertas más fácilmente y evocar parajes naturales, oníricos o lo que quiera que tu cerebro desee construir.
La otra mitad del disco es la que toca más la rama indie, con temas más moviditos como Funny Girl, Be My Only Shallow Love y los eternos vocoders, que siguen enganchando a los amigos de lo analógico y la electrónica en general. Merecen una mención aparte estas secciones vocales robotizadas de Ballerina o Unplug Me, que parece la fraternal despedida de este mundo, desde un punto de vista robótico.

En definitiva, en Weekeends, PacificUV han renunciado a las canciones largas y a secciones más convencionales a nivel instrumental, para apostar por un álbum más relajado y volátil; como si se hubieran quedado atrapados en una nube. Se han acercado a su debut, en el que también se encontraban por estos metafísicos lugares. La diferencia es que esta vez han llegado a cotas emocionales mayores.

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