jueves, 13 de enero de 2011

Crónica Chuck Prophet @La Llotja, tocando CLASHicos




Ayer empezó la temporada de conciertos de 2011 en La Llotja, y lo hizo con una gran espectación para ver a Chuck Prophet versionando el mítico disco London Calling de The Clash. Le acompañaba Chris Von Sneidern, el cual salió sólo al principio de la noche a interpretar 4 ó 5 canciones. Algunas eran del documental Why Isn’t Chris von Sneidern Famous?, como Symphony of Love, con la que finalizó. Tenía una difícil papeleta por resolver, captar la atención de un público que no sabía quién era y que había venido a escuchar el London Calling. A pesar de que a veces costaba escucharle por el tumulto que había en la sala, cumplió.

El siguiente en entrar en escena fue Johnny Green, el manager de The Clash, que salió a decir unas palabras sobre ellos y a presentar la actuación de Chuck Prophet.

Y saltaron en escena estos tipos (incluido Chris Von Sneidern) de California, venidos para interperetar uno de los discos que más han marcado en la historia del punk. Había gran espectación, con la sala casi llena para ver la revisión del London Calling.

Abrieron el directo -quizá lo más sorprendente de todo- con London Calling, aunque es la que abre el disco. En un momento se podía pensar que iban a tocar en el orden del álbum, porque le siguió Brand New Cadillac, pero no fue así. A la tercera y tras el "muchas gracias", dedicaron a la gente Spanish Bombs. Claramente, una de las más aclamadas y con las que más se animó el público. Es curioso, pero cada vez que viene un grupo extranjero, se escucha perfectamente, como pasó con Wedding Present. En cambio, cuando toca algún grupo español, suele haber algún problema con el sonido.

Continuaron siguiendo clásicos para el deleite de todos los presentes, con temas como Train Vain. Se podía ver a los viejos rockeros de chupa de cuero disfrutando con la música que escuchaban cuando eran más jóvenes. No era Joe Strummer el que estaba sobre el escenario, pero Chuck Prophet y sus chicos fueron bastante fieles a los Clash. Y es que interpretar un disco tan importante y hacerlo mal, marca a cualquiera. Tampoco faltó Lost In The Supermarket, la cual se encargó de cantar Chris Von Sneidern.

Se les veía sonrientes, que se lo pasaban bien, lo que simpre es de agradecer. Conectaron bien con el público, llegando a hacer alguna bromita con alguno de las filas de delante. Y con el buen rollo que reinaba en la sala, siguieron rindiendo homenaje a una de las bandas clave del punk británico con temas como I'm Not Down,
Death or Glory o The Guns of Brixton. Indudablemente, una de las que más volvieron loco al público fue, junto con Spanish Bombs, Hateful. Imposible no dejarse llevar ante el ritmo pegadizo de ese estribillo, con el que muchos empezaron a bailar:
"anything I want he gives it to me/Anything I want he gives it but not for free"

Y esa fue la tónica del concierto, más de una hora y cuarto de rock 'n' roll y buen rollo en general. Tras la ovación final, salió de nuevo Johnny Green para despedirse.

La próxima cita, el viernes 21 de enero con los Niños Mutantes.

2 comentarios:

David I dijo...

Te agradezco que hayas hecho tú la crónica del concierto.


...me ahorras trabajo...


...y ahora, para compensar, voy a echarle una oreja a los b-sides atrasados...

Pablo S dijo...

Hombre si la haces podemos compartir impresiones, no me hagas sentir "culpable" xDDD

PD: Grande Caparrós