domingo, 20 de febrero de 2011

All Kurt Apologies


Todos sabemos qué ocurrió el 23-F, pero ¿y en el 20-F? Concretamente en el 20 de febrero, tal día como hoy, de 1967. Pues que nació una de los mitos del rock. Uno de esos iconos que tienen el dudoso placer de pertener al club de los 27 (edad de sus muertes), en el que hay personajes célebres como Janis Joplin, Brian Jones, Jimmi Hendrix o Jim Morrison. Sí, es Kurt Cobain, Kurt Donald Cobain (muy comercial el segundo nombre), aquél melenas rubio de Nirvana que era zurdo como Paul McCartney.

El portavoz de la Generación X, estandarte de los jóvenes de la época y de otros tantos en la actualidad. Nirvana fue el megáfono de la contracultura que hizo llegar a las masas lo que habían estado gestando años antes grupos como REM, Pixies o Sonic Youth. Canalizaron esa ideología de no conformarse con Michael Jackson y Rick Astley. Había que hacer algo diferente. Era el principio de una alternativa; de la alternativa.

En cuanto a la música, Kurt logró expandir la fórmula "ruido/silencio/ruido" de Pixies, que fue lo que le llevó a lo más alto, a abrir una puerta para los próximos grupos noventeros, y, probablemente, a su autodestrucción. Después de debutar con Bleach, vio como sus ídolos underground fichaban por multinacionales o iban llegando poco a poco a las masas. Así que se puso a trabajar y vomitó Nevermind. Uno de esos discos que incluso los esquimales conocen. Bajo la producción de Butch Vig (guitarrista de Garbage) y con la incorporación de un joven Dave Grohl -que más que tocar, golpeaba la batería- consiguieron impactar a medio mundo y dar a conocer eso del grunge. La misma gente de Sub Pop, su sello, les dijeron que iba a ser un "suicidio comercial". No les faltó razón. Sólo consiguieron vender 30 millones de discos.
Y así es como Nirvana se convirtieron en estrellas, y cómo Kurt empezó a juntarse con la heroína. Empezaba a sufrir las consecuencias del éxito: estrés, depresiones, drogas... Estaba superado por los acontecimientos. Tras rehabilitaciones varias y convertirse en padre, volvieron al estudio. Y grabaron In Utero, con la producción de Steve Albini (productor de los Pixies), el disco en el que pretendieron alejarse de toda la masificación que habían conseguido con Nevermind. No había melodías pop de fondo como en su anterior álbum, era un trabajo más oscuro. Más crudo, más directo. Un auténtico guantazo en la cara con canciones como Serve The Servants, el atronador riff de Scentless Apprentice, la explosiva Rape Me, Pennyroyal Tea... Y por supuesto, All Apologies, el éxtasis final inmejorable para cerrar un disco.

Y desde luego, no nos podemos olvidar del Unplugged In New York, donde se puede apreciar la profundidad de las composiciones de Kurt. Donde muestra lo bonita que puede resultar su voz, a pesar de que suene desgañitada y quebrada. Uno de los mejores unpluggeds de la historia, en el que se pueden ver las canciones desnudas, que siguen sonando potentes a pesar de no estar acompañadas de la guitarra eléctrica.
Aún se le ponen a uno los pelos de punta al oír la desgarradora versión de Where Did You Sleep Last Night.

Cobain poseía todas las cualidades para llegar a convertirse en ese icono de la cultura musical que hoy es: se crió en un hogar roto, nació en un pequeño pueblo de pescadores donde probablemente no hay muchas oportunidades, le gustaban los Beatles, Ramones y Pixies. Y encima se drogaba.
Quizá no fuera uno de los mejores guitarristas, pero con unos simples pero potentes acordes conseguió emocionar y llegar a mucha gente que jamás le olvidará a él y a su música. Porque mientras sigamos escuchándole, él estará vivo. Ha tenido y tendrá siempre imitadores. Pero Nirvana no hay más que una y murió con Kurt.

Y después de este humilde homenaje, no dejo una de Nirvana porque todos las conocemos de sobra. Dejo una de Patti Smith, leyenda viva, dedicada a Cobain:

About a Boy



2 comentarios:

Dim dijo...

no me mola a mi la canción tributo
tienes por ahi la letra?

Pablo S dijo...

Pues no, pero la puedes buscar por el todopoderoso Google.