Resbalón de Interpol

Como ya hemos coincido más de una vez, este 2010 ha estado marcado por retornos, nuevos discos de gente esperada y reuniones. Uno de esos nuevos trabajos que muchos esperábamos con curiosidad era el de Interpol.

Los de Paul Banks sacaron su cuarto trabajo, "Interpol", el pasado 14 de septiembre. Antes de escuchar el disco leí algunas reseñas en las que se decía que era algo flojo. Aunque más que flojo, quizá la palabra para definirlo sea "pesado". Al principio me mostraba escéptico, uno se suele esperar grandes trabajos de la mano de una banda como Interpol.

Probablemente para muchos seguidores puede que el disco tenga más sombras que luces. El disco no es de suspenso, ni mucho menos, pero empieza bastante bien y poco a poco se va diluyendo en una espiral de aburrimiento. Uno de los contras es que algunas canciones tardan demasiado en explotar, en llegar a ese clímax que hace que se te erice el pelo.
Se nota que las canciones están más elaboradas, aunque el resultado en ocasiones es algo insípido, canciones que no llegan a transmitir sensaciones que sí llegaban en los trabajos anteriores.

En definitiva, "Interpol" es un disco al que le falta algo, un poco de vida, esa energía que se desprendía en sus hermanos mayores. Canciones como "Safe Without", "Try It On", o "The Undoing", que a pesar de estar en español, no impide que te asalte la morriña. Nos podemos quedar con "Succes" o "Barricade", que te pegan un semitortazo en la cara, aunque no llegan a la sonoridad y potencia de clásicos como "Obstacle 1", "Roland", o "C'Mere" (por citar algunas), que sonaba mucho más fresco y vivo que lo nuevo.

En fin, pequeño resbalón para Interpol, a pesar de contar con el bajista David Pajo: disco algo plomizo y aburrido en la mayor parte del metraje.