viernes, 26 de agosto de 2011

Male Bonding - Endless Now, descansar antes de escuchar


Estos tiempos se están caracterizando por tener un alentador tufillo a 90's, lo que siempre es bienvenido. Uno de los grupos noveles que dejó un atisbo noventero y que debutó el año pasado fue Male Bonding, que nos hizo sudar a todos con su frenético primer disco, Nothing Hurts, otra perla de Sub Pop.
Lejos de tomarse un descanso, estos chavales tienen ganas de dar follón, y nosotros damos gracias por ello. Porque en Endless Now vuelven a transmitir esa aire fresco, jovial y rebelde que se echa de menos ahora. Música directa, sin florituras ni composiciones complejas. Simplemente instrumentos que suenan rabiosos y una parte vocal que ayuda a que uno se haga adicto a estos tres mozos de Londres.

La razón por la que hayan sacado un segundo disco en tan poco tiempo, al año siguiente de su debut, es la motivación que tienen de avanzar en esto. Estando de gira con el Nothing Hurts ya empezaban a escribir estas nuevas letras, ya fuera a la hora del té o en el mismo avión. Además, este segundo larga duración se ha grabado en una iglesia del siglo XIX reconvertida a estudio en Nueva York, donde han grabado ilustres como Dinosaur Jr. Y no sólo aparece aquí el nombre de Dinosaur Jr, ya que su productor John Angello (Sonic Youth, Thurston Moore, Walkmen...) ha sido el encargado de sacar brillo y producir este segundo disco de Male Bonding. Parece que este trío no sólo tiene sus referencias noventeras, sino que además se cubre las espaldas con la gente que ayudó a esculpir estas referencias.

Endless Now es de otro disco rabioso, frenético, fresco; un disco de calidad que deja a la altura del betún a todos esos grupos de skaters que azotan a sus guitarras con el mismo acorde. Claro que no tiene nada que ver, sólo se podrían parecer en el plano de ser un grupo joven y con ganas de morder. Male Bonding representa un resurgir de la música de los 90, un guiño al grunge pero amoldado a nuestro tiempo; con esa melodía pop tan pegadiza que les hace prácticamente infalibles en la primera escucha. Uno acaba agotado después de escucharlo.

Respecto al año pasado, ahora vuelven con más capas de guitarras; es un gustazo oír cómo entran en un segundo plano. Es difícil juzgar cuál de los dos álbumes es mejor; el otro tenía tintes más apocalípticos, este tiene un sabor más pop, más melódico. Pero que nadie se alarme que el sudor sigue siendo el mismo. Con este nuevo toque, el disco se pasa más volando. No obstante, y en líneas generales, siguen fieles y mantienen su base musical, a pesar de que ahora hayan añadido más arreglos instrumentales y vocales. La parte vocal desde luego, es otro de los puntos fuertes, esos coros acompañados del ritmo de guitarra y batería suben la adrenalina en cuestión de segundos. Está todo preparado para la autocombustión en directo.

El único respiro que uno se toma en Endless Now es The Saddle, un minuto y medio de relax para retomar otra vez los guitarrazos y los ritmos vertiginosos. Como pepinazos están Tame The Sun, la que abre el disco; Bones, la pieza más larga que tienen hasta ahora; What's That Scene?, un tema de los de ir a por todas; y las dos joyas: Can't Dream y Dig You Out, el arrebato más indie pop y que podría entrar en un top con las mejores canciones del año.
El resto de temas, clase media para seguir agitando la cabeza de arriba a abajo.

El disco se puede escuchar en streaming aquí. Vivan los re90's.

miércoles, 24 de agosto de 2011

Red Hot Chili Peppers - I'm With You. Buen intento, pero la misma sensación de siempre

Uno de los momentos más esperados por la gran mayoría, poder escuchar por fin cómo suena lo nuevo de los Red Hot Chili Peppers sin John Frusciante. Un par de días después de que se pudiera escuchar por anticipado en streaming, el disco ya está colgado en la página oficial, y de hecho está filtrado por ahí a 320 kbps.

Ahora que todos le hemos podido dar varias vueltas, ya estamos en condiciones de emitir un veredicto firme. Por una parte tenemos a la iglesia fruscianista, que se mostraba reticente de que RHCP pudiera salir adelante sin John Frusciante, ese guitarrista que ha marcado a una generación -o dos-. En el otro lado, están los que confiaban en la banda; y es que en los últimos años la gente se ha venido quejando de la trayectoria del grupo, y dentro de él estaba Frusciante. De todas formas, seguramente coincidiremos en que Frusciante no era o ha sido el problema de los Red Hot en la última etapa; más bien uno de los pilares que hacía que aún levantaran espectación algunas canciones.

Después de saber que iba a sustituirle Josh Klinghoffer, su heredero, había mucha expectación por ver cómo iba a reaccionar con el grupo. Ya lo hemos hecho. ¿Diferencia? Ninguna. De hecho, el sonido sigue intacto, la única diferencia está en los coros. La diferencia de verdad se verá cuando toque en directo los temas que nacieron con Frusciante.
La inclusión de Josh tenía dos caras: algunos tendrían ganas de ver qué aportaba, y otros estarían rezando para que mantuviera el sonido Red Hot.

Al final ha hecho esto último, no mojarse y seguir los pasos de Frusciante de los últimos tiempos. Si eso es mejor o peor, ya depende de los gustos de cada uno. Desde luego, se nota que en este disco los californianos se han esmerado por intentar cambiar un poco de rosca, o al menos no decepcionar a los fans, sabedores de ese desencantamiento o de esa indiferencia ante los nuevos trabajos. Han logrado que I'm With You no sea un disco soporífero (que no se haga tan farragoso como Stadium Arcadium) y han incluido algunos detalles que antes no utilizaban, como el piano o la trompeta. Pero también se echan de menos cosas, muchas cosas. Por ejemplo, algún hit, alguna canción que se desmarque de las demás y quede identificada como 'clásico'.
Está muy bien que el buen rollo impregne el disco, pero echamos de menos al Anthony Kiedis que rugía salvajemente en Parallel Universe o en Around The World, por citar su última gran época, aunque aquí ya empezaban a mostrar su parte más melódica, que continuó con By The Way. Disco infravalorado para el que escribe, por cierto.

Al menos en este I'm With You han hecho un amago semi-funky, pero sigue siendo el mismo perro con distinto collar, aunque esta vez el collar es algo diferente al del doble suicidio de Stadium Arcadium.
Monarchy Of Roses es una buena forma de empezar el disco, pues muestra perfectamente lo que es el álbum en su conjunto, Klinghoffer cumpliendo a la guitarra, Flea imprimiendo un ritmo que recuerda a Californication y un Kiedis que definitivamente no tiene ganas de gritar (de hecho la última vez que se le escuchó gritar precisamente en Californication). Lo que pasa a continuación es que nos encontramos con Factory Of Faith, la típica canción que aborrece a la gran mayoría de fans de RHCP; carece de sustancia, otra vez Kiedis con la entonación de siempre y una guitarra que salva los muebles en parte de la canción. La primera que deja buen sabor de boca es la tercera; Brendan's Death Song. Tiene un principio que recuerda al One Hot Minute y mientras Flea mantiene el ritmo magistralmente y Klinghoffer armoniza, llegan los coros que recuerdan a los mejores RHCP de los 2000.

El disco continúa hacia adelante, recuperando las pocas reminiscencias funky de Californication y By The Way, que se perdieron en Stadium Arcadium. Encontramos más amagos -siempre encabezados por Flea- en temas como Look Around, con Kiedis autoplagiando sus coros de By The Way. Avanzando nos topamos con el buen rollo que desprende Did I Let You Know y esa trompeta que mencionábamos antes, por fin un arrebato de frenetismo en Goodbay Hoorray, más dichoso buen rollo en Happiness Loves Company... En el tramo final nos encontramos con la bythewayesa Police Station, canciones lentas como Meet Me At The Corner, que distan mucho de las grandes canciones lentas de los Red Hot, y para cerrar Dance, Dance, Dance, con unos RHCP que parece que con la edad se nos han acaramelado.

En resumidas cuentas, un disco que a botepronto ha dejado buenas sensaciones debido a la sugestión de escucharlo con tanta ansia. Sinceramente, creo que cuantas más vueltas le demos, más nos daremos cuenta de que es simplemente otro disco más, aunque mejor que Stadium Arcadium; más regular y no tan soporífero. A pesar de que Flea siga dando clases de cómo sostener una canción con el bajo y Klinghoffer dé el callo, sigue faltando chispa, alma, algún ingrediente que han perdido con los años. Esa parte incorrecta y censurable de letras descaradas que les hacía especiales.
Puede que Californication fuera un techo que no han sabido superar, aunque lo toleraron bien con By The Way. Serán cosas de la edad, pero Kiedis ya no tiene ganas de hacer el macarra en las canciones, y sabiendo que obviamente no vamos a volver a su época de los 90, creo que esto no lo levanta ni la genialidad de Frusciante. Como era de esperar, el disco suena mejor que el single, que nos dejó un poco tibios a todos.

Permitiéndome una licencia alimentística para expresar lo que siento, escuchar en antaño un disco de RHCP era como tomarse una guindilla a pelo; ahora es como tomársela con agua, pan y otros alimentos para evitar el sabor picante.








lunes, 22 de agosto de 2011

The Gift - Explode, pop perfecto

Un gran disco de pop, una gran voz y unos teclados que dan una ambientación especial.
No, no es la descripción de la última sensación de las islas británicas, ni tamopoco el regreso de un clásico de EEUU. Es lo último que han hecho The Gift. A veces no hace falta cruzar el mar para encontrar discos tan bien acabados; sólo hay que ver lo que se gesta en el país vecino, Portugal.

Es lo que tiene cuando es la mejor banda de Portugal (que no se piquen Autoramas). Llevan años sacando discos que son un gustazo para los paladares del pop más selectos, pero nunca teniendo un gran eco mediático. Para eso ya están los ingleses, The Gift va conquistando terreno poco a poco, siempre ganando algo más de fuerza con cada nuevo trabajo. Por eso tienen que ir a pasos seguros si quieren llegar a más gente. Aunque realmente, tampoco parece que pretendan eso; más bien disfrutar de sus discos con quien los quiere escuchar y seguir imprimiendo esa pasión por la música. Es decir, cualquiera que se haya visto conquistado por joyas como Music.

Explode es el quinto larga duración de estos portugueses, que cada disco que editan consiguen darle otra vuelta más a su pop, o simplemente mejorarlo. La portada del disco ya deja entrever que lo que se avecina es una explosión de colores, de alegres melodías pop cargadas de vitalidad. Un disco repleto de intensidad sonora. Así es Explode.

Empieza el disco con Let It Be by Me, un adelanto a lo que es el álbum, con una Sonia Tavares que va entrando en calor mientras su voz se difumina entre el teclado que gana el protagonismo al final. Sigue Made For You con Tavares a la cabeza en la parte vocal, aunque acompañada por sus amigos. Es una de las joyas del disco, la parte musical, impecable. Nuno Gonçalves es un hacha componiendo. El toque de piano, los arreglos electrónicos del fondo y la poderosa voz de Tavares hacen de esta canción un claro ejemplo de lo que es The Gift. Explode está lleno de detalles, como los coros de Mermaid Song, que parece una canción venida de un mundo onírico.

No faltan los habituales temas largos, como si de pop progresivo se tratase, que superan incluso los 10 minutos (The Singles) o los 8 (Always Better If You Wait For The Sunrise). Las dos acaban explotando, pero a su manera, ya sea con alguna guitarra más afilada o con una sinergia perfecta entre el piano y la voz de Sonia. En el último tramo del disco aún nos quedan algunos de los temas que más energía desprenden, como la positiva My Sun o Race Is Long.

The Gift no será un grupo que vaya a llenar estadios ni vaya a marcar una generación, pero desde luego, pocos interpretan el pop como ellos.

Let It Be by Me by The Gift Official

Made for You by The Gift Official +

My Sun by The Gift Official



viernes, 19 de agosto de 2011

The Kills - Blood Pressures, garage para toda la familia

Corren tiempos difíciles para muchos, la sociedad está en ebullición, parece que incluso se está polarizando. La crisis, los recortes, los desahucios, la dificultar de llegar a fin de mes... ¿Soluciones? Evadirse y utilizar algo como válvula de escape. Una las válvulas más eficientes siempre es la música, y si es un disco de buen rock mejor. Pero, ¿qué disco? Pues por ejemplo el nuevo de The Kills.
Siempre parece que las dos superpotencias en música sean Inglaterra y EEUU, pues nada, los fusionamos y ya está. Así tenemos a este dúo de amiguetes prolíficos como son la americana Alison Mosshart y el inglés Jamie Hince.

Blood Pressures es el cuarto disco de estudio de esta pareja de garageros, que ha visto la luz en este sagrado 2011. Siguen practicando ese rock garagero del que son partícipes, aunque abrazan de vez en cuando el blues, de forma que podríamos decir que tienen un toque de Black Keys que siempre se agradece.
A pesar de que han ralentizado el nivel de desfogue que llevaban a cabo en su debut, Keep On Your Mean Side, aún mantienen esa semilla de rock y blues con guitarras de corte psicodélico setentero que les hace muy pegadizos. La verdad que a cualquier amigo del rock debería costarle renegar de este grupo, y por ende, de este disco.

El álbum resulta bastante completo, porque lejos de encasillarse en un patrón en el que saquen once canciones con cuatro acordes, cambian el registro varias veces, haciéndolo así más interesante. Y como buen dueto, juegan muy bien la baza de los dobles vocales, aunque ya de por sí la voz de Alison es un punto fuerte más que añadir a los Kills. Si bien es cierto que en cada uno de sus cuatro trabajos, los pilares son los mismos, siempre les intentan dar otro molde. Y así han hecho con Blood Pressures.

El pistoletazo de salida lo pega Future Starts Now, un tema que da a conocer el buen gusto por el sonido garagero, y otra prueba más de que no es necesario más que una batería y una guitarra para partir la pana. El riff cortante mezclado con el redoble de tambor demuestra que es de lo mejor del disco. Después continúa la misma fórmula pero con Satellite, donde encontramos el siempre infalible coro doble, a ritmo lento pero sobre volandas. La misma arma también la utilizan con Nail In My Coffin.

Pero no todo es solemne rock inflamable, también hay momentos más desnudos como Wild Charms o The Last Goodbye, donde podemos disfrutar de la cálida voz de la señora Mosshart. Ese amago de psicodelia se puede degustar en las guitarras de Baby Says. Y para finalizar el álbum, tenemos una buena dosis de blues rock con Damned If She Do, You Don't Own The Road y Pots And Pans.

Resumiendo, Kills aún sigue fiel a su sonido garagero, que aunque está bastante visto en estos tiempos, aún pueden sacarle punta. Y lo demuestran en discos tan completos y solemnes como este Blood Pressures.




miércoles, 17 de agosto de 2011

Lagartija Nick - Zona de Conflicto, la vieja escuela no falla

Volvemos hoy a repasar uno de los discos pendientes que quedaban de este 2011, y además de uno de los pilares del rock alternativo español: Lagartija Nick.
Los de Antonio Arias llevan años en este mundo y no necesitan presentación, pioneros de esta música en Granada y en el país entero.

Este año salió a la luz Zona de Conflicto. A estas alturas, cabe esperar que Lagartija Nick tienen poco que ofrecer, más bien demostrar que siguen al pie del cañón y que mantienen el tipo con el paso de los años. Pero nada más lejos de la realidad, lo cierto es que han dejado una grata sorpresa con este álbum. Llevar 20 años haciendo ruido no es fácil. La travesía para Lagartija ha sido llevadera pues su discografía es de lo más variada y atrevida, quizá ahí está el secreto, que nadie se esperaba un disco tan descarnado ahora, pero viniendo de ellos, tampoco es de extrañar. Desde el debut con Hipnosis, hasta este Zona de Conflicto han realizado cameos con el flamenco junto al maestro Enrique Morente y han dado una de cal y otra de arena; a veces ejerciendo un excelente rock melódico, y otras mostrando su parte más dura e industrial.

Este duodécimo álbum de los granadinos sigue la línea de rock crudo que asoma en parte en Larga duración, aunque la diferencia radica en que ese aura áspera no se esfuma a lo largo de las nueve canciones.
Letras tristes en Panorama nº5, rock apagado en Vuelo Nocturno, temas que pretenden cerrar heridas en Mi Vida Anterior... Antonio Arias aún tiene muchas cosas que decir, seguramente le hayan influido la muerte de Enrique Morente, a quien está dedicado el disco, y su divorcio de Lorena Enjuto, que por razonse obvias, ya no está en el grupo.

Pero a pesar de todos estos baches y de llevar 20 años dando lecciones de rock, Lagartija Nick sigue con esas letras surrealistas de Antonio Arias, escudado por Eric Jiménez y Víctor Lapido. Suficiente para seguir sonando igual de tajantes y poderosos. Por cierto, el único atisbo de luz en el disco, Zona de Conflicto, figurará obligatoriamente en la lista de mejores canciones españolas del año.

sábado, 13 de agosto de 2011

Crónica Arenal Sound Sábado+Domingo: The Third Guincho

SÁBADO

Empezaba otro de los días fuertes y más intensos del Arenal Sound, un viernes repleto de electrónica en el escenario principal. La más exquisita fue la que practicó el bueno de Pablo Díaz-Reixa, o lo que es lo mismo:

El Guincho
Empezaba fuerte la tarde noche con uno de los músicos electrónicos de vanguardia en este país. Encerrarse en Berlín y samplear sonidos en un zoo le sirvió para vomitar el fabuloso disco del año pasado Pop Negro. Disco del que pudimos disfrutar en el escenario DAS. Una actuación colosal, es más, puede que la mejor de todo el festival. Dicen que la felicidad está en pequeños momentos; puede que muchos fueramos felices durante aquella actuación. El sonido tropical y exótico de sus canciones creó un aura de buen rollo increíble entre el público. Un honor tener a gente en el país como Pablo Díaz-Reixa, muy amiguete de los teclados y de tocarlos con baquetas, en modo xilófono. Da igual que suene Antillas, Bombay, Las Novias o Soca del Eclipse, El Guincho lo parte igual.

Delorean
Y si aún estábamos en éxtasis de ver a El Guincho, después era el turno de otros pesos pesados de la electrónica nacional: Delorean.
Aunque quizá tocaron demasiado pronto -22:30-, al ser de noche ya había más público, predispuesto a darlo todo ante los de Zarautz. Y así lo hicieron. Dieron otra vez esa muestra de electrónica elegante pero atmosférica a la vez, muy bailable. Buen concierto de los vascos, donde repasaron Subiza y otros clásicos anteriores como Deli o Seasun. La explosión de energía positiva de Real Love, mezclada con las luces, ponía los pelos de punta. No obstante, al final se hizo un poco lineal.

Layabouts
Siempre es un placer ver a grupos rock n rolleros que sean contundentes, como Layabouts. Otra vez con el batería aporreando para hacer un agujero en la membrana del bombo. La verdad que sorprendió ver la cantidad de gente que había, y lo entregada que estaba, pues los grupos que tocaban en el Escenario Legendario no se podían comparar con la cantidad de gente del DAS. Pero esta vez la gente sí que se acercó a sudar con temas como To The End, Fine For Me o Rock's Dead. A pesar de que su música se disfruta más en una sala, donde la energía se multiplica, demostraron quen o pierden ni un ápice de potencia en un escenario al aire libre. Y tienen actitud de sobra; quizá demasiada, sobraron algunas palabras del cantante, que de vez en cuanto soltaba alguna perla en nombre del rock que ellos practican.

La otra alternativa a Layabouts podía haber sido Rinocerose, pero al escuchar el principio no parecía tener mucho interés, un concierto de electro rock más. Lo cual no quita que uno no se lo pase bien, pero había que administrar fuerzas. Así que después de Layabouts fuimos a ver a Love Of Lesbian. Empezaron con el John Boy y continuaron con Las Malas Lenguas. La verdad, no acabo de aclimatarme a ellos, tuvimos que irnos para no quedarnos durmiendo. Además, se cuenta que tocaron más de dos horas y a las tres de la mañana no se pueden tocar canciones que le entren a uno ganas de hacer nono.
En realidad, todo era una forma de hacer tiempo para ver una de las propuestas más interesantes del festival, la de

The Suicide Of Western Culture
Parece que el sábado era el día propicio para las propuestas vanguardistas electrónicas, y después de El Guincho y Delorean, era el turno de este dúo barcelonés, que en breves dará el salto a EEUU. Encandilaron con su debut y lo llevaron al Arenal Sound, junto con las típicas proyecciones conceptuales que siempre quedan bien con este tipo de electrónica. Un verdadero gusto sonoro escuchar en directo sintetizadores industriales como los de A Forest Of Greyhounds Hanged o Battersea Power Station. Además, el tener los sintetizadores les permitió modificar su actuación, metiendo nuevos sonidos y matices. Además tuvieron el plus de hacer un guiño al 15-M, poniendo una pancarta en su mesa que ponía "Madrid Resiste". Una de las actuaciones del día.



Orbital dj Set
Muchos hubieramos preferido que vinieran en formato live, pero bueno, cuando se trata de gente veterana como Orbital, uno se fía de su criterio. Hicieron una gran sesión, en la que empezaron más fuerte, con más electrónica zapatillesca, para ir rebajándola poco a poco, llegando a una IDM y música más suave. Es decir, manejaron perfectamente los tiempos de su sesión. Sonaron el Ready To Go de Republica, que lo suelen pinchar siempre, y lo mezclaron con You Give Love A Bad Name, de los (insoportables) Bon Jovi. Conforme iba amaneciendo la música era más agradable, más digna de una amanecer de relax, combinando algún sonido de 8 bits con su clásico Halcyon On And On. Y así acabó el sábado.

DOMINGO

El domingo era el día de los valientes, de los que pudieron sobrevivir y aguantar lo que fuera para ver a sus artistas -o simplemente para estar de fiesta-. Con lo variado que era el cartel, el domingo era el turno del mestizaje y el flamenqueo, pero lo que a mí me interesaba era ver a ¿Daft Punk?¿Sus sobrinos? A este paso no lo sabremos.

The Third Twin
Aunque ya dijeron de forma oficial que eran los sobrinos de Guy Manuel de Homem-Christo, con lo que han mareado, uno no sabe hasta qué punto podrían ser Daft o no. En cualquier caso, si son los sobrinos de verdad, es más french house, no es nada nuevo, lo que pasa que tienen ese toquecillo de ¿y si son Daft Punk? Es más, si no son ellos, se parecen demasiado, tienen falta de originalidad. Lo que pasa que tienen un par de bombas como son Your Brain Is Pure y Until The End. Y esas dos sí que son dignas de Bangalter y Homem-Christo. Pero claro, vaya usted a saber si son ellos o no, porque los tipos salieron que no se les veía ni un ápice de piel: con traje gris, sombrero, gafas de sol y una malla gris en su cutis. Así que nada, que cada uno saque sus teorías y compare estaturas y diámetro de cabezas.

En cuanto a la sesión, estuvo guapo, pero no fue para tanto; jugaban con que el público estaba deseando que salieran de repente con los cascos daftpunkianos. Al final no hubo suerte. Empezaron con Euphoria, su último tema, y cerraron con Until The End, el desmadre final. A medias de sesión pincharon otras canciones como Technolers o el otro hit, Your Brain Is Pure. Cabía la posibilidad de que se cumpliera el sueño porque las bases de las canciones sonaban a ¿sus tíos? descaradamente. Es más, había momentos en los que parecía que sonaba de fondo One More Time o Harder Better Faster Stronger.

Para cerrar tenían que venir los Zombie Kids, pero se cayeron del cartel.
Así que nada, buen festival, pero con muchas asperezas que limar a nivel organizativo, sobre todo del camping. Por cierto, dejad ya de cantar el lo looo looo lo lo de Seven Nation Army. Gracias. Y no fueron 160.000 personas, me imagino que cada día irían las mismas 40.000 arriba abajo.

martes, 9 de agosto de 2011

Crónica Arenal Sound 2011 Jueves+Viernes = Torbellino Bizarro

Llega la hora de desengranar el Arenal Sound, que ha dado mucho que hablar estos días, y si no que se repasen las páginas de facebook que han salido últimamente. El festival en sí, aunque demasiado variado, estuvo bastante bien a nivel de grupos. Lo que no estuvo tan bien fue la organización, que parece que se vio desbordada, sobre todo en la faceta de los campings. Las duchas sólo estaban en uno de los campings, y en los demás, aparte de haber sólo un (o ninguno) puesto de comida, era todo tierra y suciedad. Por no hablar de la poca seguridad que había.
Está claro que los aseos en los festivales son inmundicia pura, aunque da la impresión de que estuvieron especialmente descuidados. Sobre todo en el Camping D, donde ya es famosa la explosión del camión limpiador, dando lugar a ese espectáculo natural que es la lluvia de mierda.
Pero que bueno, todo es mejorable en esta vida, y los festivales también. Esperamos que los organizadores se pongan las pilas para el año que viene. Que de todas formas, a nivel extramusical, no todo fue malo, había gran ambiente, playa cerca y lo que es importante: dentro del festival había comida y bebida a buen precio!
Y ahora, a lo importante.

JUEVES

Supersubmarina
Como pasa a veces, llegamos más tarde de lo previsto, por lo que no llegamos a tiempo de Supersubmarina, sólo pudimos ver el final. De todas formas, desde lejos se pudieron escuchar LN Granada, XXI, Ana, Cientocero... Están sorprendiendo cada vez a más gente, este grupo apunta maneras.

The Charlatans
Al final la jugada salió mal, porque no nos dio tiempo a ver Supersubmarina y por otros imprevistos no pudimos ver entero el concierto de estos clásicos de Manchester. Ahora eso sí, tocan muy bien en directo; esa mezcla de rock ochentero con los teclados Hammond le da un toque señorial que ya no existe. La pena fue que no se dejaran para el final The Only One I Know. A pesar de ser viejas glorias, responden en directo. Algunas de las que sonaron fueron North Country Boy, Can't Get Out Of My Bed o Tellin Stories. Se fueron con el clásico Sproston Green. Aunque sonaba bien y transmitía buen rollo, se hizo un concierto demasiado plano, al final aburría un poco.

Tiga
Una impresionante forma de cerrar el jueves. El set que se marcó sí que fue el set de un manitas en los planos. No abusó mucho de sus producciones, prefirió irse por los otros temas que no suelen faltar en sus sesiones, como el Pacha on Acid de Afrojack. Pero lo que más impresionó de su actuación no fue su selección musical, sino su habilidad en los platos. En su inicio de sesión, empezó con unos bpm electrizantes pero lentos, y poco a poco les iba dando velocidad. Era como estar atrapado en una tormenta eléctrica. Realmente fue un desmadre, puso el escenario DAS patas arriba.

VIERNES

Ya con más tiempo, instalados y tranquilamente, el sábado era uno de los días fuertes, con varios conciertos muy interesantes seguidos. El primero de ellos fue el de los valencianos

La Habitación Roja
La pena de su directo fue que sólo duró una hora, pero fue suficiente para repasar clásicos como Febrero, Voy A Hacerte Recordar, El Eje Del Mal, Un Día Perfecto... Especial mención para La Edad De Oro, una de sus canciones especiales que no son hits, como Los Amantes y la Paz, aunque esta no tocó.
Desde luego, no había una gran masificación, aunque sí un buen grueso de fieles que disfrutó de sus pop rock. A veces es mejor que sean pocos y que se entreguen, y eso fue lo que pasó. Todos los allí presentes respondieron, porque se las sabían todas, y ayudaron a los valencianos a corearlas. Se echó de menos escuchar Scandinavia.
Nos enviaron a ver a los siguientes compatriotas:

Triángulo De Amor Bizarro
Algo está pasando últimametne en Galicia. Y ese vendaval de buena música está liderado por este triángulo tan peculiar. Demostraron por qué son uno de los grupos punteros del país. Ese sonido tan ruidoso que hacen es un torbellino en directo, y nosotros estábamos en el ojo del huracán. Puede que en ocasiones no se entendiera mucho lo que cantaban, pues es difícil sobreponerse al estruendo de sus armas sonoras, pero no importaba nada. El concierto fue caos y destrucción, y eso siempre se agradece. Una de las actuaciones del festival sin duda. Repasaron temas de sus anteriores discos y también del último, Año Santo. Entre algunas de ellas, Super Castlevania IV, El Fantasma de la Transición... Por supuesto, cayeron sus dos últimos trayazos, De La Monarquía A La Criptocracia y Amigos del Género Humano. Además, tocaron El Baile De Los Caídos por demanda popular, lo que demuestra además su empatía con el público.

Vetusta Morla
Como era de esperar, el concierto más esperado del día. Estaba increíblemente lleno, hasta la bandera. Incluso metros y metros y metros atrás, aún había que pasar poniendo la postura de la pantera rosa. Tocaron prácticamente todo lo que la gente quería escuchar, fue un concierto equilibrado con prácticametne todos los hits de Un Día En El Mundo y temas de Mapas como Los Días Raros, Lo Que Te Hace Grande, En El Río, Maldita Dulzura, Baldosas Amarillas... Y para cerrar llegó el jolgorio final, con un auténtico triplete mortal: Rey Sol, El Hombre del Saco y La Cuadratura del Círculo.
Fue un buen concierto, aunque no sonaron con tanto cuerpo y grandeza como en el Low Cost. Lo que sí que cambió, y cada vez va a más, es la actitud de Pucho en directo. Cada vez recuerdan más a una banda de estadio, con grandes temas que todo el mundo se sabe al dedillo y que corea hasta quedarse afónico.

Vive La Fete
A veces a uno le supera su vena fan por encima del concierto. Eso es lo que me pasó con los belgas Vive La Fete, que me quedé sugestionado porque tenía muchas ganas de verles. Ciertamente, la cantante desafinaba un poco y no logró sobreponerse al concierto, que ya de por sí aún sonaba como un poco lejano. Pero eso no impidió que se montara una buena fiesta, porque la gente tenía ganas. De todas formas, no se puede negar que tienen actitud y predisposición a liarla en los directos. El público también tenía predisposición, y más si empiezan con Assez. Por el camino sonaron temas como Mr. Le President o Maquillage. Especial éxtasis y desfase al final, cuando cerraron con la que todos esperábamos: Noir Desir.

Calvin Harris
Una de las decepciones del festival, en cuanto a que mucha gente se esperaba que pinchara sus producciones, e inclusive que las cantara. Pero nada más lejos de la realidad, vimos su faceta como dj. A pesar de que tardó unos minutos porque tuvo unos problemillas con el sonido, pudo pinchar sin ningún problema. Su sesión estuvo divertida, electro house típico para aguantar y llegar al subidón. A esas horas a la gente le da igual que pongas eso, se lo pasa bien igual. Ahora, está claro que los fans del inglés se esperaban otra cosa y por esa parte se sintieron poco defraudados. En cuanto al set, pues un set corriente y moliente rompepistas.

Eme Dj
Entretenida forma de amanecer con Marta Fierro. En su set combinó electrónica bailable con algún tema pop, aunque para el gusto de algunos (yo incluído) a veces daba una de cal y otra de arena; un tema muy para romper el escenario y otro más pachanguero. Pero bueno, en todas partes cuecen habas. Queda claro que el viernes fue uno de los días fuertes del festival.

martes, 2 de agosto de 2011

Disco Las Palmeras!, rock inflamable

Siempre se ha dicho que la cuna -o al menos la tierra más prolífica- para la música independiente española ha sido Granada. Seguramente sea cierto en un alto porcentaje. Pero últimamente, algo está pasando en Galicia. Llevamos varios años en los que no paran de salir grupos cada vez más interesantes, y sobre todo, de cabecera nacional.
A sumar a los ya clásicos Triángulo de Amor Bizarro y otros más recientes como Nadadora y Niño Y Pistola, hay que añadir unos cuantos más, pero hoy nos vamos a centrar en uno de los debutantes de este año: Disco Las Palmeras!

Es cierto que su debut salió hace unos meses, pero nunca es tarde para hablar de las buenas cosas, no?
El debut de estos lugueses se llama Nihil Obstal, uno de los discos alternativos más interesantes que se nos ha ofrecido este año a nivel nacional. Su música destaca por unas guitarras ruidosas, que recuerdan bastante a los buenos de Lagartija Nick, unas atmósferas inflamables, y un cantante que arrastra su voz, cediéndole el protagonismo a la música.
Nihil Obstal es uno de esos discos que no te dejan descansar, con distorsiones oxidadas que se hacen densas pero que no puedes dejar de escuchar. Un disco abrasivo que te quema y te produce calor. Es inevitable escucharlo en directo y no permitir entregar tu cuerpo a estos gallegos.

La verdad, no es un disco que resalte por su variedad musical, pero si te gustan las distorsiones, los decibelios y los ritmos inflamables, este disco no te decepcionará. Abre con La Casa Cuartel, que va encendiendo la mecha con un bajo que viene y que va, hasta que más tarde se expande el fuego. Cuando escuchas por primera vez el disco y oyes el primer corte, piensas: "suena bien". Pero lo bueno de este trabajo es que esa sensación no desaparece, después del gancho de derecha viene el gancho de izquierda, y otra vez a empezar. A los Indecisos, Del Miedo A Mis Viajes, Desde Hoy Perfecto... Es un no parar hasta que acabas con la undécima, la oscura Testigos de Dios, que te sumerge en un mar de guitarras.

Indiscutiblemente, una banda de futuro y uno de los discos nacionales del año.

Disco las palmeras! - Nihil Obstat [mtp002] by Matapadre