lunes, 30 de mayo de 2011

Diaper Island, Chad VanGaalen no falla

Últimamente todo el mundo ha estado parado esperando a poder escuchar lo nuevo de los Fleet Foxes, y acto seguido flipar. Puede que sea el efecto Vetusta Morla. Algunos grupos destacan tanto en un género que ensombrecen a otro que no tiene nada que envidiar. Pasó hace poco con Vetusta Morla y Nudozurdo, por ejemplo, y está pasando ahora con los estadounidenses Fleet Foxes y el canadiense Chad VanGaalen.

Es cierto que Chad Vangaalen ya parte desde una posición más 'underground'; no es tan conocido como los Fleet Foxes, a pesar de compartir sello en Sub Pop. Esto se debe a la gran acogida que recibió Fleet Foxes, su debut, en la crítica.
Quizá si el canadiense intentara aglutinar sólo un género ganaría más adeptos dentro del folk, pero precisamente ese abanico de variedad es el que hace tan especial a Chad; ese abanico que puede gustar a folkeros, rockeros y a amigos de lo electrónico. Algún purista le ha aplicado el dicho de "el que mucho abarca poco aprieta". Pero este no es su caso, con la experimentación y la innovación ha sido como se ha avanzado en la música. Chad Vangaalen no marcará un antes y un después en la música, pero puede que sí haya cambiado algo en el panorama folk. Pocos artistas han mezclado folk, rock y electrónica sin tapujos y con un resultado similar.

En Diaper Island, su cuarto disco, ha vuelto a conseguirlo. Ha vuelto a crear una obra en la que no descuida ninguna de sus facetas. La parte del disco menos buena la tenemos al principio, donde se centra algo más en su parte más folk. Do Not Fear y Peace On The Rise son los dos temas que abren el álbum. Pero en la tercera posición ya nos encontramos con un guantazo en la cara: Burning Photographs. Impide que te quedes durmiendo si no te ha gustado mucho las canciones que le precedían. Es una de las dos o tres canciones con estribillo machacador que suele meter en sus trabajos. Después encontramos Heavy Stones, donde se apodera de su harmónica al más estilo Dylan y el adelanto del disco, Sara, que se desinfla después de escuchar el pegadizo silbido.

Después de Sara viene la mejor parte del disco. Nos encontramos con la movida Replace Me, con el reverb de la nana rock Blonde Hash, la delirante Freedom for a Policemann, las gotas psicodélicas de electrónica vertidas en Can You Believe It?... Para acabar tenemos canciones con ritmo farragoso en acabado electrónico como Wandering Spirits, la tranquila No Panic/No Heat y la espiritual Shave My Pussy.

En resumen, Chad VanGaalen, ni ha cambiado y ni ha cambiado. No ha cambiado porque no le hace falta y no ha mejorado porque al menos de momento no puede. Esto es lo que ofrece. Y no es poco. Canciones marca de la casa en las que mantiene su identidad y hace temas que se convierten en oro para los oídos de sus fans (como yo). A la altura de Soft Airplane. Probablemente mejor. Uno de los discos del año.


viernes, 27 de mayo de 2011

Wire - I Should Have Known Better


Lo primero, lamentar que no le esté dando tanta vidilla al blog como quisiera, porque me paso bastante tiempo ocupado en el tema del 15M y Democracia Real Ya que todos conoceréis. A ver si puedo dedicarle más tiempo a esto.

Tengo pendiente hablar de unos discos que me han gustado bastante estos días, pero primero voy a poner una canción acojonante, que me cuesta poco y no necesita previo estudio.

En los 70 fueron los Pistols, los Ramones y los Clash quienes se llevaron la gloria punk. Al menos el reconocimiento, porque los Pistols eran incomprendidos en algunas partes por razones obvias. Después hubo otros que no causaron tanto impacto mediático, al menos a los niveles de los anteriores nombrados, y que tuvieron igual trascendencia para las generaciones venideras. Estamos hablando de los londinenses WIRE. Llevan en activo desde el año 1976. Decidieron llevar el punk por otros terrenos. Combinaban sintetizadores y guitarras distorsionadas, concentradas en un atractiva niebla de música oscura. Es lo que hoy conocemos como el movimiento post punk.

Lo llamativo de Wire es que lleva más de 30 años en activo y siguen autoproduciéndose y haciendo lo que les da la gana. Desde luego, una forma brillante de poder experimentar y mejorar tranquilamente. A pesar de que han tenido varios periodos temporales sin actividad, aún siguen en activo y dando guerra para los que les conocen. En su disco de este año, Red Barked Tree, demuestran lo que es envejecer con dignidad, no como muchas otras bandas.

La canción que quiero mostrar hoy no es The 15th, su clásico por antomasia, sino otro tema de ese mismo disco, 154. Es I Should Have Know Better, un tema arrítmico que rompe con los patrones establecidos para hacer una canción. Ese ritmo de batería, esa guitarra que interviene para embrutecer el ambiente, esa atmósfera oscura... Marca de la casa Wire.

Aquí os dejo los enlaces:

SPOTIFY
YOUTUBE

lunes, 23 de mayo de 2011

B-Side #27 Especial Covers


Muchas veces ocurre que los músicos quieren rendir homenaje a sus héroes, o quieren saber lo que es tocar canciones que ellos quisieran haber compuesto. Es el mundo de los covers, donde hay auténticas pifias, pero también auténticas joyas que incluso superan a la canción original. En el B-Side de hoy oímos algunos covers llevados a cabo por gente tan dispar como Pixies, Redd Kross, Vitamin String Quartet, Dum Dum Girls, Placebo o California Guitar Trio.


B-Side #27 Especial Covers

sábado, 21 de mayo de 2011

The Vaccines, post punk bailongo

Todos los festivales, como es obvio, tienen que tener algún reclamo fuerte. Y más los nuevos, para que provoquen un gran impacto en plan, "hostia! Has visto esto?". El DCode ha sido inteligente y ha configurado un buen cartel con nombres españoles, algunos electrónicos, otros clásicos, y grupos que están dando mucho que hablar este año. Uno de ellos son The Vaccines.

Es otro de los enésimo grupos de raíces post punk. Como pasa con todas las bandas de este género, la primera reacción suele ser "esto suena a Joy Division total". Sí y no. Al menos en este caso. Este grupo novel sigue teniendo esa guitarra marca de la casa de Joy Division, con ese aire ochentero, que también puede recordar al sonido que utilizan Interpol, pero no tan oscuro. La principal ventaja, o mejor dicho, su principal apuesta que les diferencia de los demás, es la energía positiva que transmiten. No permiten que te dejes envolver en ese ambiente tan gris o semidepresivo que puedan tener otros compañeros.

Se ha hablado mucho de que es otro más; otro de los tantos que han salido en los últimos tiempos como Editors o Glasvegas, por nombrar alguno. Se les tilda de hype, otra vez el debate está servido. Que si no son para tanto, que si no es nada nuevo, que si son la hostia... Yo la verdad que al principio era un poco reacio por eso, porque son más de lo mismo. Pero siempre hay que darle varias vueltas para buscar otro punto de vista. Y, realmente, quizá no sea nada nuevo, pero eso no debe impedir que disfrutemos de la música sin prejuicios.



Sinceramente no es algo tan repetitivo, quizá tiene los mismos patrones post punk, pero suena mucho más revitalizado. Una versión nueva. Vaccines son muy enérgicos, y tiene toda la pinta de que en directo son un torbellino para la pista de baile. Para eso tenemas temas tan directos como el que abre, Wreckin' Bar (Ra Ra Ra), If You Wanna, Norgaard, Wolf Pack... Y también tenemos los medios tiempos que son los más conocidos del disco, como Blow It Up y Post Break Up Sex. En la última parte del disco nos encontarmos con un punto y aparte, la embestida del álbum: Family Friend.

Así que dejemos de someter a prejuicios a los grupos y disfrutemos del a música. What Did You Expect From The Vaccines? es un muy aceptable debut. Así que preparad los zapatos de claqué.





martes, 17 de mayo de 2011

Kasabian agitará el DCode


Seguimos hablando y desgranando del DCode Festival, ese nuevo evento musical que tendrá lugar en Madrid los días 24 y 25 de junio y que seguro que se consolidará como uno de los grandes festivales de nuestro país.
Hoy hablamos de una de las grandes apuestas para este debut: KASABIAN.

Aún me acuerdo la primera vez que escuché Club Foot. Me hizo levantarme del sofá para ver rápidamente a quién pertenecía ese videoclip. Y después vino L.S.F. en ese Kasabian. Se nos presentaba un interesante (aunque algo irregular) debut, con una banda de britpop que recordaban a los Stone Roses (deben estar hartos de esta comparación) o a Oasis en su versión más rockera. Y además, todo ello con unas pinceladas electrónicas muy jugosas. Desde luego que Reason Is Treason o I.D. son buenos temas, y aunque L.S.F. sea un señor hit, Club Foot destaca de entre las demás. Además de que fue la primera -eso siempre la hace especial-, el ritmo abrasivo que imponen la guitarra y la batería más los arreglos electrónicos de fondo, la convierten en un señor clásico.

Un par de años después, en 2006, vuelven a la carga con Empire. De nuevo, otro single que promete, que es el que da título al álbum. Lo que me gusta de Kasabian es que sus discos no tienen una idea central, al menos musicalmente. Lo mismo abogan por las guitarras cargantes, que con rayadas electrónicas o canciones tranquilas. Este segundo disco es una muestra de ello. Está el hit Empire, la setentera Shoot The Runner, la agotadora Apnoea, las electrónicas Stuntman o Seek & Destroy, la trompeta de The Doberman...

Los grandes (o al menos famosos) grupos, aparte de por tener buenos discos, se diferencian del resto por tener hits. En West Ryder Pauper Lunatic Asylum nos encontramos con dos pepinazos. Uno Underdog; el otro Fire. Quitando estas grandes canciones, que se desmarcan del resto, hay que hacer una mención especial a temas como Vlad The Impaler, Fast Fuse, Secret Alphabets o Ladies And Gentleman. En ellos, siguen flirteando con la electrónica y con algún que otro toque de psicodelia.
Utilizan la misma fórmula de siempre, pero si gusta y funciona, ¿por qué cambiar?

Lo mejor de todo esto, aparte de que los verás en el DCode y que tienen un buen directo por lo que dice Youtube, es que en Octubre podría llegar su nuevo disco. Y que dicen que han tomado la idea del Ok Computer de Radiohead... Viendo sus pinceladas electrónicas, puede salir algo realmente bueno. Estaremos atentos.

Por cierto, ya está bien de que si se copian de Ian Curtis, de Primal Scream o de Santa Teresa de Calcuta. Todo el mundo tiene sus influencias, otra cosa es que hablemos de plagio o de burdas imitaciones.








sábado, 14 de mayo de 2011

Destroyed: reMOBYendo sus clichés



Vuelve el nieto de Moby Dick; pero no el nieto de la ballena, sino el del escritor, ese que hace electrónica.
A pesar de que Moby ha aflojado el pistón en los últimos años, siempre es interesante ver con qué viene bajo el brazo. Hace un par de meses pudimos oir el ep Be The One, el adelanto de lo que sería el nuevo trabajo, Destroyed. Incluía los temas Be The One, Sevastopol y Victoria Lucas. La cosa prometía, como la mayoría de singles de Moby.
He de reconocer que la primera vez que escuché Destroyed me dejé llevar por la euforia porque me entró fácil y me gustó bastante. Pero hay que darle varias vueltas a los discos para emitir ya una decisión firme.

Aunque en su último álbum, Wait For Me, se recuperaba un poco, lleva varios discos que ni fu ni fa. El principal problema es que los discos son demasiado irregulares, y por ello se hacen un poco monótonos. Incluso si nos vamos al Play, (o al 18, donde no hay tantos hits), nos encontramos con eso; 7 u 8 temas muy buenos, y el resto canciones normalitas, más bien discretas. Así a botepronto puede sonar algo exagerado, pero probemos a esuchar el Play. Quitando los exitazos y poco más, seguro que las demás las pasamos rápido. Pero a los grandes discos se les recuerda por eso, porque al menos la mitad de los temas son pepinazos.

Con Destroyed vuelve a tropezar en la misma piedra. Canciones poco trascendentales que intentan darle cuerpo a 3 ó 4 que resaltan claramente sobre las demás.

"No duermo muy bien cuando viajo. Como resultado, tiendo a estar despierto en las ciudades cuando todo el mundo está dormido. De ahí sale este álbum, y las imágenes que lo acompañan. Fue escrito principalmente de noche, en las ciudades en las que toco. Sentía que era la única persona despierta (o viva). Es una banda sonora para las ciudades vacías a las 2 de la noche, por lo menos así es como lo escucho. Las fotos fueron tomadas en la gira, mientras yo estaba escribiendo el álbum. Quería mostrar un lado diferente de viajar y viajar. Un lado que a menudo es mundano, desconcertante y hermoso de vez en cuando". Esto es lo que se puede leer en la página de Moby, donde se puede escuchar Destroyed online. La verdad que es una introducción que promete buenas sensaciones para el disco. Y así es, a veces.

El disco empieza con un tema espléndido, The Broken Places, que transmite esa sensación de tranquilidad después de una tempesta, de lugares escondidos y abandonados. En el corte 2 nos encontramos con Be The One, el tema movido del disco. Muy efectivo; con la orquestación típica de Moby en segundo plano y con una vocoderizada voz, típica de Vitalic. Esta se encontraba en el ep, al igual que Sevastopol, la que le sigue; una canción para viajar por el universo. Tenemos también canciones con vocal como The Low Hum, aunque es flojito. Como la nana Rockets, echa para dormir. Quizá en esta parte del disco (temas 4,5,6, 7...) encontramos un desnivel. Está The Day, en la que canta el propio Moby, otro cliché sonoro que ya aburre.
En los cortes 9 y 10 encontramos Victoria Lucas y Blue Moon, respectivamente, con unos coros que recuerdan mucho a Mike Oldfield. Y al final del álbum nos encontramos con el Moby más sensible, tirando de música clásica en Stella Maris y The Violent Bear It Away. Entre estas paredes hay un hueco para uno de los temas de Destroyed: Lacrimae. Una pieza de 8 minutos que va en crescendo, incluyendo por el camino unos buenos latigazos sonoros.

En definitiva, otro refrito de Moby. Un disco que empieza muy fuerte pero que al final se hace muy largo, y teniendo en cuenta que ya es largo de por sí... Quizá Richard Melville debiera buscar inspiración de día, o en otras ciudades. O directamente, dejar de hacer discos tan largos. Aún hay que esperar para disfrutar de obras maestras suyas como como esta.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Crónica del SOS 4.8: SÁBADO

7 de mayo de 2011, una fecha que jamás olvidarán muchos, y que marca época en el SOS 4.8. En pocos años, el festival murciano ha congregado a artistas clásicos, tanto de rock como de electrónica, pero leyendas o mitos de la música contemporánea ninguno. Hasta el día 7 de mayo de 2011; el día en que el SOS disfrutó de



PATTI SMITH: Uno siempre se emociona cuando ve a su artista preferido, cuando se ha recorrido kilómetros y kilómetros sólo para verle, aunque le cueste un ojo de la cara. Pero también se puede emocionar cuando ve a alguien por lo que representa. En este caso, una leyenda vida; un capítulo de la historia del rock, y en este caso, una de las pioneras que han ayudado a la liberación de la mujer en el mundo del rock. Nada más ver pisar el escenario a Patti Smith se me pusieron de punta hasta los pelos de las piernas, como me imagino les pasaría a las otras 1799 almas que había en el Auditorio, que se transformó en una ovación al ver a la madrina del punk. Le escudaron el guitarrista que le ha acompañado casi siempre, Lenny Kaye(Clint Eastwood?) y el bajista Tony Shanahan, que estuvo comandando el bajo electroacústico y el piano. Después de la ovación, todo listo para escuchar a este icono punk. Se mostró muy activa durante todo el concierto, demostrando esa actitud que siempre la ha acompañado. Y lejos de comportarse como lo que es, una estrella, se mostró cercanísima al público, acercándose a él y dándole la mano a alguno que otro (recuerdazo para la vida). Interactuó con el público chapurreando español, y se lo ganó dedicando algunas canciones a Roberto Bolaño, pero sobre todo, a Severiano Ballesteros, que falleció ese mismo sábado. Se declaró una fan del golf (¿deporte punk?). En cuanto a temas, pues sonaron My Blank Year, Dancing Barefoot, Downton Train, su versión de Helpless de Neil Young... Pero obviamente, lo que todos esperábamos eran los clásicos. El primero que cayó, la emotiva Ghost Dance, en la que todos -incluida Patti-, acabamos con las manos apuntando al cielo del Auditorio. Otro de los que tocó más pronto fue el Free Money. Pero el que todo el mundo esperaba fue el Because The Night de Bruce Springsteen que ella hizo suyo. El momento karaoke emotivo en el que todos cantamos. También cantó Patti, que por cierto se equivocó pues empezó a cantar antes de tiempo, en el solo de Lenny. Pero un día malo lo tiene cualquiera y recibió otro sonoro aplauso para que la canción siguiera su curso. La verdad es que se aplaudía por todo, yo diría que si se hubiera tirado una ventosidad todo el mundo hubiera estallado de júbilo ¡Dios mío es maravilloso! Y después del Because, cayó People Have The Power, en el que invitó al Sr. Chinarro a subir para que tocara con ellos. Otro que cumplió un sueño. Y después de levantar el puño y gritar a favor del pueblo y oír como nos decía que éramos el futuro, llegó al hora del bis. Justamente para cerrar con Gloria+Rock n Roll Nigger, lo que faltaba.
En resumen, un momento mítico para el festival, y para mucha gente; unas butacas al lado mío había una mujer llorando de felicidad. Se puede pensar que fue una pena escuchar los clásicos en acústico, pero así disfrutamos del poderío de voz de Patti y de la gran acústica del Auditorio. Lo mejor del día. Un mito de 64 años, con una gran vitalidad y naturalidad, importándole un pimiento escupir en el escenario como hizo. Un placer, señora Patti. (La próxima vez mejor en un gran escenario no?)

Después de disfrutar de esta leyenda, fuimos un rato a escuchar al bueno de

CARIBOU: Puso una sesión de electrónica de calidad. Hipnótica y exótica, como él hace. Liviana. Demostró su gusto fino para pinchar la música del palo que él produce. Una pena que no viniera a interpretar sus temas, aunque sonó Odessa, y trabajó sobre la base de Bowls: delicioso.

Se hizo la noche, y se acercaba la hora de ver a los platos fuertes, así que antes de ver a Editors, decidimos ver el principio de

MUJERES: Ya se me escaparon en el Primavera Sound, y esta vez quería verlos al menos un rato. Aunque me perdiera escuchar la gran Blood Meridian. Empezaron como lo que son, un torbellino rock n rollero. Recomendable para cualquiera que quiera ponerse las pilas. Actitud y vitalidad sobre el escenario pero también fiesta. Una combinación letal. Y más si tienen temas como Frantic o Amusement.

Y al fin llegó el grupo que más ganas tenía de ver. Ya había visto en vídeos de Youtube que a Editors en directo les falta fuerza, así que quise comprobarlo.

EDITORS: Para mí, la gran decepción del festival. Tenía la esperanza de que esos vídeos de youtube tuvieran baja calidad en sonido. Pero la verdad es que no. Los Editors sonaron apagados en directo, incluso en algunas ocasiones, su cantante, Tom Smith, dio la impresión de que se ahogaba para interpretar los temas. Me quedé casi el concierto entero para ver si evolucionaban favorablemente, pero nada, el paciente estaba perdido. Suenan fieles en directo, sí, eso nadie lo duda. Pero les falta energía, saber hacer que esa música grandilocuente se propague en sus conciertos. Daban ganas de subir al escenario a decirle a Tom que cantara más fuertes. Es una verdadera pena, porque con la voz tan grave, potente y solemne que tiene, podría ser un concierto maravilloso. Pero la realidad es que tienen que mejorar mucho su directo, aunque le pongan ímpetu, porque es una pena que temas tan épicos o intensos como An End Has A Start, Munich, Smokers Outside The Hospital Doors, The Racing Rats, Bones o Papillon no brillen como deberían. En algún vídeo, como el de Munich, quizá tengáis que subir la voz porque parece que se haya bajado. Es el primer concierto de un festival en el que pude hablar con mis colegas sin tener que gritarles en los oídos. Y las canciones nuevas que presentaron, pues bueno, alguna no estaba mal. Pero todas siguen el mismo patrón.

Y seguimos con los siguientes a Editors, que se los comieron. De la no actitud, pasamos a la actitud con

SUEDE: Lo mejor en cuanto a grupos del sábado. Puede que alguno se quejara de que no estaba Bernard Butler, ¿pero realmente se hubiera notado? En qué! He leído por ahí que no es lo mismo sin Bernard. Pues puede ser, pero será para hacer nuevas canciones no? Porque para tocar en directo, con tener un buen guitarra que sepa las tablaturas... Quizá la gente hubiera estado sugestionada por ver a Suede al completo en directo. Pero en cualaquier caso, Brett Anderson se comportó como hace 20 años, un tipo carismático en el escenario que así disimuló además el mal sonido del escenario. Pues la acústica parece que se la llevaba el viento (es cierto que hicieron la prueba de sonido justo antes) y a veces costaba unos segundos descifrar qué canción era. Pero al final, fue un gran concierto para rememorar lo que fue el britpop con uno de los clásicos. Y clásicos fue lo que tocó Suede, porque es lo que la gente quería. Sonó Animal Nitrate, Trash, Saturday Night, So Young, The Drowners... y para cerrar Beautiful Ones.

Llegó el momento electrónico de la noche del sábado. Y empezamos con los madrileños

THE ZOMBIE KIDS: Estuvieron irregulares. Sí que es verdad esa actitud macarra que tienen, aunque también es ese el papel del MC animafiestas. Que por cierto, cantaba canciones diferentes a las que pinchaban. Desarrollaron una sesión contundente, para poner patas arriba el Jaggermaister, como hicieron todos los dj's de electrónica. Aunque el dúo madrileño puso más variedad, ya fuera poniendo Jump Around de House Of Pain, un simpático remix del Equipo A, el Kernkraft 400 de Zombie Nation, el Riverside de Sydney Samson o el Pacha On Acid que también puso Steve Aoki. Por cierto me sentí estafado en el momento de Zombie Nation, porque el MC cantó el Teen Spirit pero no la soltaron!! En fin, hubo momentos en que insultaron nuestros oídos poniendo esa basura de Barbara Streisand de Duck Sauce, pero estuvo bien, variadito y fácil para momentos de hedonismo bailotero.

Y para cerrar nos fuimos con el plato gordo de electrónica del día, el señor

TIGA: Demostró por qué es uno de los grandes, desde bien tempranito empezó a soltar sonidos electrizantes con los subidones que a todos gusta en un festival. Cómo no, pinchó el dichoso Pacha On Acid -que también pincharon Aoki y Zombie Kids- de Afrojack. Aunque hubo un momento en el que se enclaustró en ese sonido Afrojack, que puede llegar a ser molesto con tanto pitido. Pero supo salir, con unas disculpas en forma del Kids de MGMT remixeado por Soulwax. Como no podía ser de otra forma, pinchó su remix de Washing Up (aunque demasiado pronto), una brillante versión de la canción de Blade de los Warp Brothers, el Mind Dimention, su You Gonna Want Me... y un largo etcétera de trayazos. También un gran remix de Popof para su Sunglasses At Night. La mejor opción para cerrar a todo gas (que dirían los conductores prudentes). En ese momento de estancamiento perdió fuelle su sesión, pero se recuperó y en general fue un gran set.
Por cierto, se permitió el lujo de tuitear con una foto a todos los presentes en medio de su set:



Ale, nos vemos en el SOS 2012, ¿no?

martes, 10 de mayo de 2011

CRÓNICA SOS4.8: VIERNES

Por fin llegó el momento que muchos esperábamos. El primer festival del año; una de las citas que se puede decir que se ha convertido en obligatoria, al menos para los que vivimos cerca de Murcia: el SOS 4.8
Así que vamos al meollo de la cuestión, a ver qué tal se portaron los grupos que vi. Lo primero, nombrar que el viernes me perdí a uno de los principales que quería ver, Triángulo de Amor Bizarro. Y por lo que he leído, le metieron bastante caña. Una pena.

Cosas incomprensibles que pasan en los festivales, te sales a beber, vas al aseo, te encuentras con unos colegas... pasan los minutos y cuando te das cuenta te has pasado de hora. Y eso fue lo que me pasó con el francés. No lo vi entero, pero me bastó para comprobar lo bueno que es.

YANN TIERSEN: Magistral. Una oportunidad única de ver una propuesta así en el SOS, una oportunidad para ver a uno de los virtuosos de nuestro tiempo, que se lleva igual de bien con violines que con guitarras. Al principio tenía miedo de ir a verle, porque lo mismo te toca la parte de músico bohemio delicado francés que la parte más épica y rockera. Al final supo encontrar el equilibrio. No se está hablando mucho de él, y creo que debería ser uno de los nombres mayúsculos que aconteció en el SOS. Y más si te cierra con una canción tan tremenda como Palestine, tema que se incluye en su último trabajo Dust Lane.

Después del francés le tocaba el turno al grupo español que más sensación ha causado desde 2008. Obviamente, hablo de

VETUSTA MORLA: Un directo corto, apenas una hora, pero intenso. Al menos para los que allí nos congregamos. En cuanto a grupos, creo que para mí fue lo mejor del viernes. Es cierto que no sonaron a la perfección, también por el pésimo sonido del escenario principal, y se nota que aún tienen que ponerse en marcha. Pero desde luego, fue un conciertazo. Empezaron con esa gran canción que abre Mapas, Los Días Raros, un tema marca de la casa. A la tercera cayó En El Río, el tema de adelanto del disco. Y después de hacer una introducción mapera, empezaron a soltar los clásicos. Poco tardó en caer Valiente. Después fueron alternando temas del nuevo trabajo como Maldita Dulzura o Boca En La Tierra. Pero claro, los clásicos son diferentes, y la gente se volvió loca con Copenhague , Sálvese Quien Pueda o La Cuadratura del Círculo. Desde luego para mí, lo mejor el final, donde tocaron Rey Sol, una de mis preferidas, y cerraron con El Hombre Del Saco. Demostraron por qué son, le pese a quien le pese, EL GRUPO español. Al menos en estos momentos. En mi vida había visto a tanta gente corear de una forma tan fiel las canciones de una banda nacional. La gente no terminó de enganchar con las canciones nuevas, pero es normal. Es la novedad, y aún no se han aprendido las letras. Quizá tampoco conecten tanto con el nuevo disco, pero gana con las escuchas y tiene más matices, gran producción. Obviamente, el debut se lo sabían (sabíamos) al dedillo.

Después de ver un poquete de rock, llegaba la hora de la electrónica, género en el que hubo bastante abundancia este año. El primero por el que pasamos fue

TRENTEMOLLER: La verdad que no sé bien qué esperaba más de este tipo, pues tiene un repertorio variado y todos los premios habidos y por haber en Beatport. No me quedé el concierto entero porque había que reponer fuerzas para lo de después (ay lo de después!). Dio un concierto emotivo, con dosis de techno ambiental, aunque desde luego, me fui antes de tiempo. Me perdí el momento de botar, de disfrutar del tema que más me gusta. Sí, ése, el delirante Silver Surfer And Ghost Rider Go.

Se acercaban las 2 de la mañana y ya sabíamos qué significaba eso. La hora de morir. La hora de aguantar -en el sentido físico de la palabra- a los

THE BLOODY BEETROOTS DEATH CREAW 77: Una salvajada. Es la tercera vez que los veo, y empiezo a pensar que nunca me cansaré de verlos. Lo de estos italianos no tiene nombre, menuda bestialidad se marcaron. Ya quisieran muchos grupos tener a ese batería.
De las tres que los he visto, desde luego fue la más destructiva -en el más amplio sentido de la palabra-. Y más si el colega con el que vas es un insensato que se quiere meter en el centro de todo, ahí donde se bota y se pegan hostias. Nos tuvimos que salir porque temimos por perder nuestro calzado. Y no es coña, hubo un momento en el que botaba con el zapato en la mano. Los Bloody esta vez empezaron tranquilitos, con uno de sus mejores temas FFA 1985. El problema está cuando quieren que mueras y te tocan Warp 1.9 o Cornelius. Casi nada. Al final del vídeo de Warp se oye a una chavala diciendo "me he hecho daño". Normal, para no hacértelo maja. Propongo crear unas camisetas que sean "yo sobreviví a los Bloody Beetroots en el SOS 2011". Lo he dicho muchas veces y no me canso, los Rage Against The Machine de la electrónica. El tipo debe dejarse las cuerdas vocales en su papel de Zack De La Rocha. Para mí lo mejor del viernes, y probablemente de todo el festival. No paraban de meter caña, subidones y bombas. Imposible descansar.



Y para amantes del masoquismo, como era obligatorio para cumplir la romería salvajista, tocaba ir a ver al chinorris Steve Aoki (después de un pequeño descanso, por favor).

STEVE AOKI: Un simpático chino que no es consciente de que vienes de ver a los Bloody y quiere acabar contigo. Como cualquier humano que no hubiera "hecho trampa", me fui antes de que cerrara. Pero estuvo lo suficiente como para rebentarme más todavía. Otra sesión de electro demoledora, aunque no tanto. Puso temas para no fallar, como el siempre eficiente Washing Up de Thomas Andersson (remix de Tiga), su remix propio para Kid Cudi, Pursuit Happiness, con ese sonido sucio que se lleva ahora, tan típico de Dada Life o ese tema a quemarropa como es Pacha On Acid de Afrojack. Una sesión que seguro nadie olvidó. Y al final se fue con esta barbaridad que no pude ver (ya era hora de hacer nono).

También nos pasamos un rato por Amable, pero no gustaba lo que estaba pinchando en esos momentos, no eran los clásicos a los que acostumbra (al menos en ese momento), así que otra vez al chinorris. Y así acabó mi viernes del SOS 4.8

MAÑANA LA CRÓNICA DEL SÁBADO!!

lunes, 9 de mayo de 2011

B-Side #26



Volvemos de una vez a la radiola!! Esta vez con un puñado de interesantísimas novedades (Antlers, Times New Viking, Yuksek, Eleventh Dream Day, Beastie Boys, Gang Gang Dance, Okkervil River...) y un breve repaso al SOS con Patti Smith, Suede y Vetusta Morla.

B-SIDE #26

jueves, 5 de mayo de 2011

Vetusta Morla - Mapas, sin sorpresas, pero sin sustos



Sacas un debut muy bueno, llegan unas pocas críticas y millones de alabanzas. En muy poco tiempo te elevan a lo más alto y ya te presionan con que a ver si estás a la altura en la próxima. Y tres años después, con todo el mundo pendiente, sacas tu segundo trabajo. Y ya llegan, los primeros detractores diciendo que si es un coñazo, que si aún se nota la marca de Radiohead, que si es más de lo mismo... ¿pero qué os esperábais? ¿Un disco de gospel? Por supuesto, también han llegado los enhorabuenas y las felicitaciones por el nuevo trabajo.

Son las consecuencias de que Vetusta Morla te acostumbrara al caviar con Un Día en el Mundo, que ahora vienen las comparaciones. Inevitables siempre. No es que nos hayamos tirado de los pelos estos tres años para escuchar Mapas, pero había ganas. ¿Y el resultado? Pues evidentemente siguen en su línea, con ese pop rock bien compacto y grandes letras que hablan de superarse a sí mismo, de amor y de seguir adelante. En cuanto a la producción del disco, hay más intensidad, la música suena más grandilocuente. También da la impresión de que el álbum tiene más caras, más matices que disfrutar que no había en Un Día en el Mundo. Por ejemplo Pucho explora más su registro a la hora de cantar, hay más coros y también guitarras con más distorsión.

Las impresiones, el disco suena fresco, hay buen rollo, huele a verano. No llega a la altura del debut (menuda sombra), pero se acerca, que es lo importante. Sobre todo la primera mitad del disco, que está en un nivel altísimo con canciones como Los Días Raros y su tempestad final, una gran carta de presentación. Le sigue la tremenda vibración positiva de Lo Que Te Hace Grande, después tenemos En El Río, con las embestidas de Pucho acompañadas por la música -¿principio con homenaje a Mediterráneo de Serrat?-. A continuación están las metáforas de Baldosas Amarillas, donde Pucho se desliza por la música como si fuera un seda. Y llegamos a una de las más bonitas del disco, con Boca En La Tierra, perfecta para sacar los mecheros a pasear y corear el estribillo.
Pero si para mí hay una canción que resalta sobre las demás, ésa es El Hombre Del Saco. Himno al canto, grandes arreglos en segundo plano con un estribillo que no dudo que la gente cantará a grito pelado en los conciertos: Puestos a pediiiiir!! Además tiene esa segunda parte de embestida a lo Rey Sol, donde se juntan todas lps instrumentos. A partir de aquí es donde veo que el disco se vuelve más irregular, con alguna balada a la que le falta chicha, mezclada con la marchosa Mapas, que evoca a Valiente, o la espiritual Mi suerte.

En definitiva, han estado a la altura. Como era obvio, no ha habido grandes cambios, porque no los necesitaban. Han sabido dar al público lo que quería. Un buen disco, que mejora en la producción y que alberga 4 ó 5 temas para sumar a la larga lista de clásicos que dejó Un Día En El Mundo: Autocrítica, Sálvese Quien Pueda, Un Día En El Mundo, Copenhague, Valiente, Pequeño Desastre Animal, (vaya, la lista no termina) Rey Sol, Saharabbey Road...
Si hubieran otro disco repleto de clasicazos estaríamos hablando de máquinas. De todas formas, creo que es un disco que gana con las escuchas, no hay que tomar un veredicto rápidamente. Pero creo que todos coincidiremos en que la primera mitad es muy buena y al final es algo más irregular.

Puede que con Vetusta se haya creado un hype, pero un hype merecidísimo. Pocas bandas en este país han tenido un debut así, que suene a grupo ya consagrado, maduro. Y a todo esto hay que sumarle esas letras nada simplonas o previsibles y bastante elaboradas. De los mejores letristas del país, y creo que indiscutiblemente. También les hace diferentes que al estar catalogados como grupo 'independiente', logran llegar a un espectro de público que para nada es seguidor del género. Tienen un sonido más accesible, pero llegan igual a todos, gafapastas, rockeros o pijos.

Lo que más me molesta es cuando se les tilda de que se asemejan a Radiohead, o a Piratas, o a Coldplay o a quién sea. Parece que las demás bandas no tengan referencias claras en su música. En fin, que Vetusta ha vuelto y hay para rato. A disfrutar, puestos a pedir.

Estarán en el Arenal Sound de Castellón, que se celebra los días 4, 5, 6 y 7 de agosto!!





martes, 3 de mayo de 2011

¿Los Pixies en el estudio 20 años después?


Hoy sale el nuevo disco de Vetusta Morla, sí. Y en los meses venideros habrá publicaciones muy importantes en las que tengo puestas muchas expectativas. Pero ayer, de repente, salió a la luz una bomba que no me esperaba. O al menos un amago de bomba.
Imagínate que vuelve a meterse en el estudio un grupo legendario, uno de los grupos que han cambiado tu percepción sobre la música, y que ellos mismos marcaron el patrón definitivo para el éxito del rock alternativo. Muy pocos grupos tienen el honor de poder hablar de estos logros como propios. Uno de ellos son los PIXIES. Y siempre es un placer hablar de ellos, ya se a modo de presentación o de crónica de concierto.

Podría poner "los Pixies van a sacar nuevo disco". Pero eso sería faltar a la realidad. Aún no hay nada asegurado, aunque Joey Santiago y Dave Lovering (principal guitarra y batería, respectivamente) no han ocultado su ilusión de volver a grabar.
De hecho, esta es la enésima vez que van a sacar nuevo material. Ya lo dijeron en su reunión de 2004 (justamente el año en que los conocí), más tarde en su segunda gira de 2006, y por último ahora, en 2011. Ahora lo han comentado recientemente, aquí podemos ver un resumen de la entrevista que les realizaron.

Dave Lovering comentó que quieren proteger el legado. "Si hacemos algo, ya puede ser bueno. Y como avanzan las cosas -ya llevamos siete años- se hace más difícil tomar esa decisión."

Este es quizá el tema más espinoso, musicalmente hablando. El eterno dilema de si volver a grabar, arriesgándose a estropear el brillante legado que dejaron, o jugársela a ver si sale bien. Así hay y ha habido muchos grupos, no sé si tendrán ese dilema interno Rage Against The Machine -que en principio van a sacar disco nuevo-, pero muchos fans sí que han manifestado su voluntad de que las cosas se queden como están, sin ningún posible punto negro en la discografía.

Joey Santiago, en cambio, fue más allá del supuesto legado. Fue al verdadero problema más gordo que hay dentro de los Pixies. El mismo por el que se separaron, esa batalla de egos entre Black Francis y Kim Deal. Son de sobra conocidas las tensiones entre los dos a la hora de componer, donde Kim quería tener más protagonismo pero Francis era tajantemente reacio.

"Si hubiera que elegir dos personas, Dave y yo no seríamos la fricción. Probablemente serían los otros dos. El hablar de hacer un disco estará encima de la mesa porque ya será la hora. Hemos cuajado como unidad y con suerte todos podremos -y habremos- enterrar el hacha. Quizá entremos ahí y recemos para que pase lo mejor. Sabes, incluso Bono (de U2) me preguntó. Me dijo, ‘¡Por favor, haced un disco!’ Por Dios santo, no podemos dejar eso así. Eso me frustraría. Lo haría. Creo que deberíamos hacerlo. Pero está en el tejado de todos."

Personalmente, me sorprendió mucho esta noticia cuando la vi ayer. Tanta gira tanta gira, me incitaba a pensar que estaban dando tantos conciertos como para no tener que volver a juntarse en la vida. Pero por lo que parece, al menos tenemos a dos componentes que están dispuestos a meterse en el estudio.
En el momento de la reunión, ya dijo Black Francis que estar tocando continuamente por la pasta y sin sacar un nuevo álbum es más propio de mercenarios. De momento no parece que esto haya sido algo que le molestara, desde luego.

Ética aparte, ¿deben sacar un nuevo disco, 20 años después?
Esta pregunta no tiene respuesta. Una parte de los fans piensa que deberían estar quietos y no grabar, pues está en el aire esa opción de que salga fallido y la discografía quede estropeada para siempre.
Pero, ¿y si sale bien? Sería un gran momento para patear culos y poder demostrar de dónde viene la música que escuchamos ahora, sería algo así como "dejad que los maestros os enseñen". Fanatismo a un lado, está claro que si volvieran con un álbum bajo el brazo sería brutalísimo. Pero viendo los cuatro señores discos que tienen, cualquiera hace un disco a la altura.

Por otra parte, la salida del horno de un nuevo álbum significarían más oportunidades de verles en directo, lo que nunca está de más.
Si se puede confiar en ellos o no, yo creo que sí. Frank Black lleva sacando discos a cascoporro desde la disolución del grupo, o sea que no parece que vayan a tener problemas de inspiración, al menos para las letras. El apartado que más preocupa es el musical. Ya llevan 7 años juntos, lo que significa que están en forma. Y además es suficiente tiempo para dejar atrás las diferencias, ¿no?

En todo el tiempo que ha pasado desde la salida de su último disco, Trompe Le Monde, sólo han sacado estos dos temas. El cover de Warren Zevon, Ain't That Pretty At All y Bam Thwok, esta íntegramente suya. Las dos son Pixies puro, musicalmente hablando, pero están lejos de su mejor nivel, se quedarían a medio camino.

Ya veremos qué pasa, sería un placer escribir dentro de unos meses, haciendo una crítica del nuevo disco de los Duendecillos. Aunque salga fallido, yo lo intentaría si fueran ellos. Hay mucha gente esperándoles. Éste es el momento.

Si crearan algo de esto se quemaría el mundo:









Ya estamos hartos de ñoñeces y pantalones verdes. Queremos letras surrealistas, guitarras desgañitadas y cambios de ritmo vertiginosos. Queremos que vuelvan los Pixies y que vuelvan a conquistar el mundo.

lunes, 2 de mayo de 2011

Expediente Guetta, tú antes molabas


Vuelvo a los terrenos blogger después de dejar que mi vena más perruna haya fluido por mi cuerpo con total impunidad estos días y de pasar un finde en el 'Antiviña'.

Regrso con un tema que he tenido en la cabeza varios meses. Hacer una entrada dedicada al rubiales más mainstream del mundo de la ¿electrónica? Sus temas copan las radios de 40 Principales y Europa FM, las sesiones de pachanga de cualquier discoteca y desde ahora, también encabeza y de esta forma para muchos, denigra, los principales festivales de electrónica de nuestro país. Qué mejor momento que ahora que David Guetta va a Monegros para hablar de este hombre.

No voy a tocar el tema que concierne a la confirmación de David Guetta para Monegros, porque creo que mi postura es evidente. Además, después de haberle visto en el Creamfields, ya puedo decir que sé lo que hay. Es obvio que este festival no es el más indicado para la música que hace el francés, lo que me hace pensar que desde Monegros han buscado llenarse el bolsillo. Y más cuando le ponen de cabeza de cartel por encima de Richie Hawtin, Vitalic, Paul Kalkbrenner o Carl Cox. Ya veremos si les sale bien la jugada. De todas formas, mi colega Bifeis ya comentó básicamente lo que todos los seguidores de la electrónica pensamos.

Creo que a Guetta le viene que ni pintada esa gilifrase que todos hemos dicho alguna vez: "tú antes molabas". O al menos era un tipo respetable. Un tipo respetable que vino de la mano con el inicio de la década de los 2000 con house y funky elegante bajo el brazo.
Porque esa es la realidad. Más allá de criticar su paso al lado oscuro de la música, Just A Little More Love (2002), era un buen disco de house, con temas tan elegantes como You Are The Music, You, Give Me Something, Sexy 17 y pinceladas más 'electro' (qué es el electro?) como Atomic Food. Y por supuesto, el pelotazo Love Don't Let Me Go, con el que muchos empezaron a aficionarse al house/electrohouse, como fue mi caso.

En su segundo trabajo, Guetta Blaster (2004), ya empieza a alejarse de ese tono funky disco tan elegante para centrarse más en un house orientado a la pista de baile. Sólo hay que escuchar el principio con Money, Stay, Used To Be The One, y por supuesto el hitazo The World Is Mine. Sorprendentemente nos encontramos con Open Your Eyes, un tema en el que colaboran Stereo Mc's, y que es digno de uno de los grandes del electroclash francés.

En estos momentos, David Guetta ya era un tipo de sobra reconocido el mundo house. Se codeaba con gente como Axwell, Armand Van Helden o Michael Mind. Y cada vez coge más gustillo por las bases con bombo -perfectas para los subidones- y por sonidos más típicos del electrohouse; sonidos más sucios.

Así es como edita su tercer disco, Pop Life en 2007. Ya sale en la portada como un tipo subidito en la parra, como si fuera el rey del mundo. Probablemente ya lo era en cierta medida. Temas más comerciales como Baby When The Light lo petaron en ese verano, el trillado Love Is Gone, temas que combinan tan pegadizos como Every Time We Touch... Aunque para mí la bomba de este disco es Tomorrow Can Wait, en la que colabora un grande como es Tocadisco.

Un par de años después es cuando se va transformando y llega su época oscura con One Love (2009) y las posteriores aberraciones como Fuck Me, I'm Famous. Aquí es donde deja de lado sus colaboraciones con los Chris Willis (en cierta medida) y las Tara Mcdonald, para llevarlas a cabo con una de las remesas de productos más odiables que conozco: Black Eyed Peas, Rihanna, Akon, Ne-yo y demás gente de rancio abolengo.
La pregunta del millón ya la hizo el otro día Mourinho: ¿POR QUÉ?

Es difícil saber la respuesta, conocer el por qué de olvidarse de todo lo que hacía antes para colaborar con las caras más visibles de lo comercial. ¿Lo más probable? Pues sí, seguramente el dinero. Pero realmente, ¿le hacía falta? Seguro que ya se había hecho de oro. El hombre ha sido ambi(avari)cioso y ha querido ganar el triple y el cuatriple, lo que es totalmente respetable aunque indigno -electronicamusicalmente hablando- por otra parte. Debe ser esa misma razón la que les ha llevado a los de Monegros a contratarle. Ahora parece que pierda fuelle en esa etiqueta de festival sibarita, aunque todos sabemos que el auténticamente sibarita es el Sonar.

Y así es como David Guetta dejó de ser un productor de house para convertirse en otro productor más que sólo se preocupa por llegar al éxito, y lo consigue utilizando a cantantes-producto que lo aseguran, ya sea con tías que visten como prostitutas o chicos malos que se peinan hasta las cejas. De esa forma, ya puede decir que ha sido nº1 en las listas de ventas de varios países. Antes no podía.
Poned en el Spotify Axwell y veréis como los artistas relacionados son gente de su palo. Ahora con Guetta, se 'parece' a Lady Gaga, Enrique Iglesias, Shakira, Inna, Pitbull... En menudo mundillo se ha metido.

Por cierto, no todo es despotricar, cuando quiere puede. La muestra, en el disco One Love, consigue un buen tema de house de los de antaño, porque colabora con Chris Willis y con Tocadisco. Es Sound Of Letting Go. También en ese disco están Montenegro y Grr (esta la ponen los 2Many), en los que no utiliza ninguna colaboración. Demuestra que aún podría tener cosas que decir, simplemente tiene que dejar de juntarse con esa chusma con la que se junta ahora.

Pero en fin, que cada cual haga con su vida lo que quiera. Que la gente de Monegros disfrute de errores como este, digno de un pipiolo que juega con el Virtual Dj.



"Kill Me, I'm Ridiculous"